La sustentabilidad del negocio
3 Agosto, 2015 / Artículos
Más allá del marketing vinculado con la Responsabilidad Social Empresaria (RSE), el sector logístico podría aprovechar una amplia gama de acciones concretas en sustentabilidad asociadas a las operaciones: desde ahorro de energía en depósitos, tratamiento de residuos o reciclado de pallets, hasta programas para reducir las emisiones contaminantes en los vehículos o el ahorro de combustible mediante una conducción responsable.
Sin embargo, una encuesta del Instituto Tecnológico de Buenos Aires (ITBA) sobre logística sustentable realizada entre 154 empresas, muestra que en el 65% de las compañías no existen objetivos ambientales cuantificables dentro de su plan de negocios. Esto, por lo menos, aparece como un retraso si se considera que en 2014, Peter Bakker, presidente del Consejo Mundial Empresario para el Desarrollo Sustentable habló de “la muerte de la RSE como tal”, ya que “las empresas líderes están integrando la sustentabilidad a todo lo que hacen”. Precisamente, en la diversidad de actividades que envuelven a la logística, el sector debería encontrar una oportunidad para fortalecer e incorporar activamente políticas de sustentabilidad a su negocio.
“Esta demora tiene que ver con que la logística como disciplina empresaria es relativamente nueva en nuestro país, por lo que es natural que tenga un retraso frente a actividades que percibieron la importancia de la RSE con anterioridad, porque ya estaban maduras”, explica Rodolfo Fiadone, coordinador del Observatorio de Logística Sustentable (OLS) del ITBA.
“A lo mejor, las acciones de RSE de nuestro sector no son de manual, pero la mayoría de las empresas llevan a su manera programas que benefician a la sociedad”, destaca Carlos Musante, director técnico de la Cámara Empresaria de Operadores Logísticos (Cedol). Y agrega que “en la Cámara hay varias empresas que se caracterizan por la aplicación de la sustentabilidad en el negocio y, en ese sentido, es para remarcar que más de la mitad de los 13 principios que debe cumplimentar una empresa para acceder al sello Cedol, están relacionados con la RSE”.
“Mientras no se institucionalicen las acciones de RSE y formen parte de la cultura organizacional en su conjunto, quedan como actividades superficiales que no se traducen en una tendencia sostenible”, reconoce Eduardo Bastitta, CEO de Plaza Logística. Para el directivo, estás medidas “deben verse reflejadas en procesos internos, en el accionar comprometido de los empleados y en el entorno que rodea a las actividades del negocio”.
VENTAJA COMPETITIVA
Por su parte, Juan Manuel Labado, gerente de Recursos Humanos de TASA Logística, considera que el sector “se encuentra en un claro proceso de expansión en este tipo de prácticas”. Y asegura que “la implementación de medidas preventivas que minimicen el impacto en el medio ambiente representa una importante ventaja competitiva en el mercado cuando nuestros clientes eligen operadores seguros para tercerizar sus operaciones”.
En tanto que Mariela Menghini, directora de Marketing de Cruz del Sur, explica: “Estamos en un período evolutivo en el que se irán incorporando nuevos lineamientos y planificaciones para abordar estas temáticas, actuar inteligentemente y ser proactivos. Debemos transformar la gestión, rever nuestra política ambiental y de sustentabilidad, ya que tienen que ser parte de la filosofía empresaria”.
“Todas las acciones son loables y meritorias cuando tienen un fin asociado a la sustentabilidad y ese fin es comprobable”, argumenta Gabriel Pérez, coordinador del Programa de Desempeño Ambiental de Andreani. “Las empresas deben enfocarse en lo material para el negocio, para que las acciones sean más eficaces. A esto mismo nos impulsan las metodologías de elaboración de memorias de sustentabilidad como la del Global Reporting Initiative”, agrega.
Teniendo en cuenta que en el transporte de cargas por carretera aproximadamente un 45% de su costo lo representa el combustible, reducir su consumo en un 10% impactaría en reducir el costo total del transporte en un 4%, analiza el informe del ITBA. “Por eso hay que gestionar las actividades tradicionales de manera sustentable, utilizando nuevas fuentes de energía, reduciendo la emisión de CO2 al ambiente, encontrando un equilibrio entre eficiencia económica y ecológica”, sugiere.
En ese sentido, las empresas se van centrando en actividades del negocio y disminuyendo otras más filantrópicas. “Nuestras acciones distinguen dos grandes aspectos. En depósitos, implementamos mejoras en la gestión de energía con luminarias LED y una correcta gestión de residuos e insumos reciclables. En transporte y distribución, hacemos foco en la optimización de las bodegas, de rutas y la capacitación a los transportistas”, resume Gabriel Pérez.
En el Centro de Operaciones Logísticas de Cruz del Sur, y mediante una empresa especializada, controlan el área de pallets a través de la recolección, compactación y retiro de film y cartón, desechando el residuo industrial que generan. “Las receptorías del área metropolitana, además, contribuyen a la reducción de la huella de carbono ya que la eficiencia en el uso de las unidades de transporte genera un menor congestionamiento”, remarca Menghini.
En términos de mitigación de impacto medioambiental, comenta Bastitta, “implementamos islas ecológicas y centros de reciclado de pallets que permiten importantes ahorros económicos, a la vez que reciclamos cantidades importantes de material”. En tanto que el centro de distribución sustentable de TASA, “reúne las características de un emprendimiento sustentable ya que su diseño y construcción reducen el impacto negativo sobre el medio ambiente, promoviendo el uso racional de los recursos”, asevera Labado.
“Cualquier solución logística de baja emisión de carbono y de transporte flexible requiere un compromiso en las empresas para conformar un plan de actuación que permita posteriormente implementar los cambios operativos”, señala el ITBA.
Por lo pronto, la mayoría de las empresas ya considera que “el éxito a largo plazo estará muy relacionado con conceptos de negocio más sustentables”.
