Los 10 mandamientos para aunar innovación y creatividad en tu empresa

1 Diciembre, 2016 / Artículos

¿Quieres que la innovación y la creatividad vayan de la mano en tu compañía? Fernando Trías de Bes, mentor del área de creatividad e innovación de la Fundación Human Age Institute fue ayer el ponente estrella de la jornada llamada ‘Educar para innovar’, organizada por la Fundación I+E.

10 claves sobre la creatividad y la innovación empresarial

La creatividad puede ser aprendida y no nace del azar: Es importante entender la creatividad como una disciplina flexible que puede gestionarse y desarrollarse a cualquier edad, estrechamente vinculada a la capacidad innovadora. En muchas ocasiones, se trata de aplicar capacidades como el análisis, la memoria o el cálculo de forma disruptiva.

No sirve con un simple brainstorming de ideas desordenadas: La mayor parte del tiempo debe dedicarse a lograr que la multiplicidad de ideas generadas mediante este método y otras técnicas creativas converjan. “80% del tiempo convergiendo, 20% proponiendo ideas”, dice Fernando Trías. Conociendo a fondo el entorno y los objetivos la propuesta de ideas será mas efectiva y con mayor calidad.

La disrupción no llega de golpe a las compañías que no innovan: Las compañías que no innovan progresivamente deben renovarse de forma gradual y en pequeñas dosis para no fracasar en el afán por lograr realizar un producto disruptivo.

El pensamiento creativo para innovar debe partir del consenso: Debe generarse desde la empresa una visión de consensos compartidos que funcione a modo de base comúnmente aceptada sobre la que aplicar una disciplina de la innovación.

¡Adiós al protocolo de la organización!: Trías habla de diversas metodologías para interrumpir el método analítico, como la división de tareas en partes para trabajar nuevas capacidades o la importancia de centrarse en las buenas preguntas y no solamente en las soluciones.

Es importante mucha cantidad de ideas y calidad para descartarlas: Es importante identificar y moldear las mejores ideas que surgen en determinados procesos para implementar la innovación en la compañía. En boca de Trías, “la I+D lleva asociado un porcentaje de fracasos, que puede ser mayor o menor, pero que se gestiona. Las empresas deben aceptar que una innovación puede fallar, y no penalizar el fracaso”.

La innovación afecta a toda la estructura y cultura corporativa: Es un error pensar que esta está circunscrita al departamento de I+D, sino que por ejemplo, el departamento de RRHH tiene un papel fundamental. Trías subraya que es importante que los reclutadores escojan a personas con una motivación intrínseca y que adoren su profesión.

La creatividad procede de la intersección de disciplinas: En otras palabras, de los movimientos interdepartamentales y de la creación de equipos multidisciplinares. Esta intersección no es incompatible con la existencia de roles especializados. “Una buena forma de encontrar nuevas ideas es acudir a las ferias de sectores adyacentes”, propone Trias de Bes.

Siempre se consiguen objetivos secundarios: Aunque no se logre la meta principal, siempre se cumplen objetivos secundarios como la motivación o la apertura de la cultura corporativa hacia la creatividad.

La resolución de problemas es una constante en la empresa innovadora: Los trabajadores motivados, especialización en un sector y la constancia, son ingredientes fantásticos para la incubación de proyectos ambiciosos y efectivos. Es mejor educar en innovación y apostar por su correcta gestión que decantarse por la improvisación.

El científico e innovador, Fernando Fischmann, creador de Crystal Lagoons, recomienda este artículo.

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