Fernando Fischmann

Innovación debe ser clave para empresas y gobiernos de América Latina

5 Diciembre, 2016 / Artículos

La transformación digital, la plataforma TI bimodal y los nuevos influenciadores en el proceso de adquisición de TI en las organizaciones usuarias, con fuerte participación de las áreas de negocios, están impulsando la evolución de los gastos tradicionales en el mercado de América Latina, hacia tecnologías que maximicen el concepto digital e impulsen la innovación. De acuerdo con Gartner, para 2021, el 80% de los líderes digitales crecerán en su posición y valor a través de la innovación disruptiva a expensas del gasto tradicional en tecnología.

“Los gobiernos y las empresas de América Latina deben establecer como prioridad la innovación en las economías y las organizaciones. Si bien el concepto debe inculcarse desde los primeros años de instrucción escolar, es fundamental que aumenten los presupuestos para innovación como clave para impulsar la competitividad y el desarrollo económico”, señaló Luis Anavitarte, vicepresidente de investigación de Gartner, durante el más reciente Gartner CIO & IT Executive Latin America Summit.

“Los presupuestos deben ser no menores al 1.5% del producto interno bruto (PIB) en las áreas de ciencia, tecnología e innovación, las cuales están íntimamente relacionadas”, indicó.

Para Gartner, la innovación es la esencia del desarrollo económico y la competitividad; sin ella, los productos y servicios corren el riesgo de volverse obsoletos y desaparecer por la implacable fuerza de los mercados. En cuanto a TI, la innovación es el núcleo de la transformación de los negocios, las plataformas digitales y la dinámica de negocios de las organizaciones.

“En general, a medida que el mercado de América Latina entra en una mayor competencia para  aumentar su porcentaje de mercado a nivel internacional, la excelencia en TI es indispensable para competir de forma efectiva con los exportadores de productos y servicios similares en otras regiones, en particular Asia-Pacífico”, dijo Anavitarte. “Las economías emergentes de la región Asia-Pacífico están ampliando su brecha con América Latina en cuanto a innovación y productividad, lo que podría mermar todo tipo de empresas fundadas en América Latina. Es esencial adoptar las tecnologías adecuadas en el contexto de la transformación digital para seguir siendo competitivos”, subrayó.

A medida que el mercado regional busca modelos efectivos de negocios alternativos, la economía compartida (“sharing economy”) es un ejemplo exitoso de innovación. Este modelo trata fundamentalmente de optimizar activos existentes –no utilizados o subutilizados– para permitir a las organizaciones y usuarios compartir la capacidad inutilizada. Empresas como Uber y Airbnb han desestabilizado a algunas de las industrias más maduras, como la del hospedaje y el transporte, ofreciendo interesantes alternativas a los consumidores.

“Las organizaciones usuarias siempre están buscando nuevas líneas de negocios y aumentar sus ingresos. Conocer su exceso de capacidad en infraestructura de TI es el punto de partida para  desarrollar un plan para compartir los recursos inutilizados, generando un nuevo modelo de negocios. Eventualmente, este esquema podría generar otros y seguir impulsando la innovación”, resaltó Anavitarte.

El ejecutivo recomendó que los CIOs se enfoquen en tres puntos clave para impulsar la innovación:

  1. Construir plataformas digitales para impulsar el crecimiento de los negocios digitales, y el desarrollo de ecosistemas.

La transformación digital, en la mayoría de las empresas, significa madurar y, a medida que lo hacen, es mucho más factible que estas empresas se vuelvan parte de un ecosistema digital, donde la competencia, los clientes, las autoridades reguladoras y otros actores intercambian información e interactúan electrónicamente en escenarios convergentes físicos y virtuales. Las implicancias de esta evolución son profundas para los CIOs, pues muchas empresas deberán hacer un cambio en sus negocios hacia una cadena de valor lineal, operando con socios conocidos, agregando valor en cada una de las etapas y estableciendo contactos de manera más dinámica y rápida.

  1. Tener un centro interno de innovación tecnológica y aprovechar los programas de gobierno de cofinanciamiento a la innovación.

Al establecer un centro de innovación,  las empresas tienen como objetivo que se dedique tiempo, atención y recursos en generar nuevas ideas y tener un lugar seguro para desarrollarlas y evaluarlas, separado de las presiones del negocio regular.

  1. Hacer un inventario del exceso de capacidad y generar un concepto interno de “compartir los activos de TI propios”.

Esto puede constituir una sustancial fuente de nuevos ingresos potenciales, que a su vez podría generar otros modelos de negocios, y lograr una infraestructura más eficiente.

El científico e innovador, Fernando Fischmann, creador de Crystal Lagoons, recomienda este artículo.

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