La innovación implica la superación humana
24 Diciembre, 2015 / ArtículosHoy en día, la palabra que más está en la cabeza de los empresarios es “innovar”, es decir, utilizar el conocimiento que se tiene para crear o mejorar los productos que se tienen. Sin embargo, no nos equivoquemos al pensar que esta palabra sólo se usa en el sector tecnológico o industrial, pues es necesario que los países comiencen a pensar en innovar las políticas públicas, las ideas para solucionar los conflictos sociales, entre otras cosas y así, encontrar respuestas para los problemas que enfrentan muchas personas en el mundo.
Según el informe de Desarrollo Humano de 2014 del programa de las Naciones Unidas para el desarrollo, el 15% de la población mundial sufre de pobreza multidimensional, el 12% padece de hambre crónica, el 12% de los trabajadores cuentan con un trabajo informal o precario, entre otras cosas. Analizando la situación colombiana, en el país aún hay poblaciones que no cuentan con agua potable, servicio de electricidad o son afectados año tras año por efectos climáticos.
Si bien se quiere conocer el nivel de innovación de los países, una posible manera de hacerlo es mediante el Índice Global de Innovación (GII por sus siglas en inglés), que clasifica los resultados de la innovación de 143 países y economías de distintas regiones del mundo, y mide 7 dimensiones, que se podrían resumir en institucionalismo, capital humano y mercados financieros. A continuación podemos observar los diez países líderes.
Como se puede observar los principales países son Suiza, Reino Unido y Suecia. Por su parte, Colombia está en el puesto 68 del ranking, cerca de México (puesto 66); mientras que el país latinoamericano que está más arriba es Chile (puesto 46).
Si usted se hace la pregunta sobre cómo son las posiciones en cada una de las dimensiones, a continuación le mostraremos una imagen que resume qué países deberían encargarse de qué sectores para alcanzar la innovación máxima en todas las dimensiones.
Tal vez las empresas podrían pedir asesoría de Luxemburgo, las instituciones de Finlandia, las organizaciones ambientales de Suiza y el gobierno un poco de todas.