Fernando Fischmann

¿Cómo potenciar el gen innovador en la empresa?

17 Septiembre, 2014 / Artículos

Si partimos de la base que las empresas no innovan, sino que las personas, deberíamos preguntarnos por qué es tan difícil hacerlo sistemáticamente; más aún si consideramos que ésta ha sido parte fundamental de la evolución del ser humano.

En base a la experiencia del Club de Innovación y lo observado en varias de las empresas socias, creo que muchas veces las culturas corporativas están llenas de fantasmas que sobreponen cuestiones personales por sobre intereses colectivos. Sin embargo, también he sido testigo que cuando se comparte un propósito en común, generando un trabajo colectivo y colaborativo, el escenario es más propicio para la innovación sistemática.

Ahora bien, cuando este propósito compartido es parte del ADN de todos los trabajadores y los conecta con su dimensión humana, el resultado es considerablemente más potente, ya que se genera un vínculo con el motor emocional de la innovación. En este sentido, son los desafíos los que generan puentes con nuestra pasión y energía, como señaló Rosario Arias, VP de Belcorp Latam en el último encuentro del Club de Innovación.

No hay duda que cuando nos sentimos orgullosos del quehacer de la organización, cuando tenemos claro el por qué, cuando generamos relaciones de largo plazo, cuando tenemos los espacios físicos y psicológicos para dialogar, cuando no tenemos miedo a equivocarnos, desataremos todo el gen innovador que, por esencia, tenemos dentro.

Si lo anterior está acompañado de un sistema ordenado y metódico, es muy probable que la organización alcance un nivel en que la innovación va a ser imprescindible, porque generará alto valor. Por lo mismo, atrevámonos a dar el primer paso para generar una cultura innovadora, tomando conciencia que no se puede dejar al azar, que requiere mucha resiliencia, pero que es absolutamente gestionable.

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